martes, 20 de mayo de 2008

Cayo Mario y Lucio Cornelio Sila

Mario y Sila: parte I (hasta la guerra con los germanos).-

La historia de la humanidad se escribe, y así reza en las obra de Plutarco "Vidas paralelas" debido al enfrentamiento entre dos grandes personalidades y Roma, cimiento sólido del edificio moderno occidental, no podía ser menos. En sus anales econtramos estas situaciones en infinidad de ocasiones: Tarquinio el Severo-Lucio Junio Bruto;Publio Cornelio Escipión el Africano-Aníbal Barca el Cartaginés; Tiberio Sempronio Graco (y su hermano Cayo)-Senado de Roma(personificaso en su mayor enemigo: Escipión Násica); Cayo Julio César- Gneo Pompeyo el Grande; Cayo Julio César Augusto Octaviano-Marco Antonio; Flavio Aeccio-Atila el Huno etc.

La historia de Cayo Mario y Lucio Cornelio Sila (finales del s. II y primera mitad del I a. C.) y su rivalidad representa uno de los mejores ejemplos a este respecto. Ambos son de origen muy diferente. El primero era originiario, al igual que Marco Tulio Cicerón, de Arpinum, y el segundo de Roma; Mario era conocido como una hombre nuevo y, por tanto, odiado por la clase senatorial romana, mientras que Sila procedía de la famosa y gloriosa gens Cornelia etc. Sin embargo, y como siempre ocurre cuando dos grandes personajes se enfrentan, también existían similitudes entre ambos, a saber: ambos tuvieron que derribar muros y salvar simas para abrirse paso entre el sofisticado (y salvaje, en ocasiones) mundo romano; fueron grandes generales, si bien Mario, realmente, no fue un hombre político, a diferencia de Sila, que fue uno de los más importantes gobernantes que tuvo Roma.

La historia de estos dos "monstruos" de la historia romana recoge todos los elementos necesarios para escribir más de una oda. Si bien son de generaciones distintas (Mario era 19 años mayor que Sila) esto no fue óbice para que su enfrentamiento tuviera lugar.

Sus vidas en entrelazan por primera vez gracias a otro ilustre nombre romano: Cayo Julio César (el abuelo del César dictador). Mario se casó con su hija Julia la Mayor, matrimonio del que nacería Mario el Joven y que duró hasta la muerte de Mario; Cornelio Sila lo hizo con Julia la Menor. De este modo quedó sellado el destino de Roma en el próximo medio siglo. En un primer momento, si bien no está del todo claro, parace que tuvieron buenas relaciones e incluso que pudo existir algún tipo de amistad entre ambos. En el año 107 a. C. Sila inició su carrera como cuestor en la guerra contra Yugurta, rey de Numidia, y fue decisivo en la captura del rey que puso fin a la guerra, sin embargo, no todo el mérito fue de Sila, pues fue Mario el que tomó el mando ante la ineptitud del cónsul Quinto Cecilio Metelo (llamado luego "numídico") y fue su genial estrategia militar la que puso fin a la guerra (pues la captura de Yugurta fue una de las operaciones pensadas por Mario). En este momento comienzan las tensiones entre ambos genios militares. La envidia de Mario radicaba en el origen patricio de Sila, mientras que éste no podía soportar ser la sombra de Mario, que con solo 24 años ya había sido distinguido por el propio Escipión Numantino en el asedio de la ciudad celta en el 133 a. C.

Dice la leyenda que cuando era joven una visionaria llamada Sara predijo a Mario su futura gloria, en tanto que habría de ser 7 veces cónsul de Roma (algo sin precedentes) y llamado tercer fundador de Roma. Fuera o no verdad lo cierto es que al regresar de la guerra de Numidia la gloria de Mario en Roma fue tal que fue elegido cónsul (por primera vez a la edad de 51 años). Y es aquí, en el año 106 a. C cuando comienza el cénit de su carrera política y militar. Por aquella época otro peligro se ceñía sobre la poderosa Roma: los germanos (teutones, marcomanos y cimbrios). Nuevamente, ante la ineptitud de los mandos militares romanos que perdieron más de una batalla, Mario fue llamado para salvar a la patria y eliminó, en Aquae Sextiae, de manera magistral a gran parte de la orda germana. Luego, junto a Quinto Lutacio Cátulo César, destrozó por fin lo que quedaba del ejército germano en el norte de Italia con lo que puso fin a la amenaza germana. La actuación de Sila en este conflicto volvió a ser notable ya que se introdujo como en las filas germanas.

Iñigo/Fernando Romero.-

2 comentarios:

Roberto dijo...

Esto también está muy bien relatado en "El Quinto Infierno"; una excelente biografía de Lucio Cornelio Sila.

Moderador dijo...

Yo también leí El Quinto Infierno, de Ferraro. Me pareció excelente.